Evaluaremos tecnología innovadora para mejorar la calidad del agua en sistemas RAS
La Asociación Empresarial de Acuicultura de España (APROMAR) y el Centro Tecnológico de Acuicultura (CTAQUA) ponen en marcha el proyecto NANOBURBUJAS, que validará esta innovadora tecnología para optimizar la calidad del agua, el bienestar animal y la productividad en sistemas acuícolas.
16 septiembre 2025 - En los sistemas de acuicultura la calidad del agua es un factor determinante en el bienestar de los peces. Parámetros como el oxígeno disuelto, el amonio, el pH o los sólidos en suspensión influyen directamente en la fisiología, el comportamiento y la supervivencia de los peces.
En este contexto, estudios recientes han demostrado que la implementación de tecnologías de nanoburbujas en acuicultura mejora la oxigenación del agua, reduce la acumulación de compuestos nitrogenados y contribuye a disminuir la carga bacteriana, lo que se traduce en un entorno más saludable, sostenible y con mayor rendimiento productivo.
Hasta ahora, esta tecnología se ha venido aplicando en sistemas de tratamiento de aguas residuales y en sistemas de regadío para agricultura. Para validar su aplicación y beneficios en acuicultura, APROMAR ha encargado a CTAQUA la ejecución del proyecto NANOBURBUJAS, enmarcado en los Planes de Producción y Comercialización de la asociación.
El proyecto se centrará en la validación técnica de esta tecnología de oxigenación mediante nanoburbujas en instalaciones de recirculación (RAS), comparando su rendimiento frente a métodos convencionales. Los ensayos tendrán en cuenta parámetros productivos, incluyendo la carga microbiológica e indicadores de bienestar animal y comportamiento.
“En concreto, probaremos la tecnología en el cultivo de trucha arcoíris (Oncorhynchus mykiss) a escala experimental bajo condiciones controladas y en condiciones de producción real. Además, evaluaremos su uso como método de aturdimiento mediante la aplicación de nanoburbujas de mezcla de CO₂ y N₂ y hielo en trucha arcoíris y lubina (Dicentrarchus labrax)”, explica Myriam Retamero, responsable del proyecto en CTAQUA.
El proyecto comenzó el pasado mes de julio y está previsto que concluya en diciembre de este año. Los resultados que se obtengan permitirán evaluar con mayor precisión el potencial de esta tecnología en acuicultura y sentar las bases para futuras aplicaciones a escala industrial.